Nota de El Sol

Organismos de DDHH: “Tenemos temor pero eso no nos va a detener”


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Era imposible que las amenazas sufridas contra una militante de los organismos de derechos humanos y familiar de un desaparecido en San Rafael no repercutiera en Mendoza. Más aún al haberse dado cuando resta muy poco tiempo para que finalice el primer juicio por delitos de lesa humanidad en ese departamento y en Ciudad comience otro debate el 17 de noviembre. Por ello, los organismos de derechos humanos rápidamente entendieron el mensaje de las amenazas y salieron a repudiar el hecho y a asegurar que entre ellos hay temor pero que eso no los va a paralizar después de 34 años de búsqueda de justicia.

SIN DUDAS. Los encargados de dar a conocer la postura de los organismos fueron Ramón Ábalo, Ana Montenegro, Isabel Pérez, Nino Bonoldi, Mariú Carreras y Eugenio París. Estos dos últimos, seguramente estarán entre los testigos del próximo debate, ya que Carreras vio cómo se llevaban a su pareja y tiene a su hermano y a su cuñada, quien se encontraba embarazada, desaparecidos, mientras que París estuvo encerrado en el D-2 y vio a una persona que luego desapareció y que, justamente, forma parte de las 18 causas que serán llevadas a juicio por el Tribunal Oral Federal 1.

Carreras fue la primera del grupo en tomar la posta y aseguró que lo ocurrido en San Rafael, en donde un grupo de personas ingresó a la vivienda de Alicia Morales, integrante de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), y revolvió todas sus pertenencias –sólo se llevaron un viejo sable–, constituye un acto repudiable. En tanto, Bonoldi afirmó que por ahora se está evaluando pedir la colaboración del Programa de Acompañante y Protección de Testigos y Querellantes en Causas de Lesa Humanidad, lo que permitiría a aquellos que lo soliciten tener custodia o algún otro sistema de seguridad.

Bonoldi explicó: “Estas amenazas provienen de los sectores que están inculpados en estos juicios, de los imputados y de los sectores cómplices de la dictadura. Si lo que pretenden con esto es un ataque a los testigos, nosotros entendemos que es lo inverso”. Por su parte, París afirmó que lo sucedido en San Rafael “no es un hecho aislado ni tampoco obra de un loquito que ande suelto, sino que, para que se libere una zona, debe haber cierto apoyo del Estado, que sigue enquistado”.

Los cuatro, al igual que Pérez y Montenegro, se mostraron de acuerdo en que se usen todos los mecanismos para garantizar seguridad a los testigos y admitieron: “Tenemos temor, somos personas que leemos los diarios y sabemos lo que pasa pero no tenemos dudas, el temor no nos va a detener”. Y agregaron que cuentan también con un equipo de profesionales que pueden acompañar el proceso de aquellos testigos que se sientan más vulnerados o amenazados, además de que reafirmaron el concepto: “No tenemos miedo”.